En los últimos meses, la preocupación ha crecido ante la posibilidad de un nuevo conflicto entre Israel y Hezbolá, el grupo paramilitar asentado en Líbano y aliado de Hamás en la Franja de Gaza.
Desde el inicio de la guerra en Gaza en octubre, ambos bandos han protagonizado ataques que han dejado víctimas en ambos lados de la frontera, siendo el territorio libanés el más afectado en términos de civiles. Más de 150.000 personas han debido abandonar sus hogares, presionando al gobierno israelí para exigir la retirada de Hezbolá de la región fronteriza y garantizar la seguridad en el norte del país.
¿Qué es Hezbolá?
Hezbolá, creado en los años 80 en respuesta a la ocupación israelí del sur de Líbano, ha mantenido una postura antagónica hacia Israel desde sus inicios. Surgido como un movimiento popular musulmán chiita, su objetivo principal era expulsar a Israel de territorio libanés.
A lo largo de los años, Hezbolá ha demostrado su capacidad de resistencia y combate, desafiando a las fuerzas israelíes con habilidad y determinación. Su presencia en la región ha sido una constante fuente de tensión y conflictos, manteniendo a la comunidad internacional en alerta ante posibles desencadenantes de violencia en la región.
